El capitoste de la UGT, consejero de Bankia, dijo de ella que era “la reliquia cañí del tardofranquismo”. Vale. Supimos luego que Alberto Ordóñez, the Artist de la extrema izquierda a quien el PSOE de Valencia invitó y ovacionó en las Cortes, había escrito en su feisbuk que Esperanza Aguirre “debería mirar SIEMPRE debajo del coche al salir de su casa”. Okey. Anotamos aquí cierta analogía en The Artist con el furor homicida del IRA a propósito de Margaret Thatcher, reflejado en la “poética” nota que le hizo llegar tras el atentado en el que intentó liquidarla y que costó cinco muertes y treinta heridos (ver post mío del 1-3-12).Luego, los extremistas volvieron a cercar la sede madrileña del PP, contra la que lanzaron bolas de acero, rompiendo los cristales del despacho de Esperanza Aguirre. Dabuten.
En éstas le llega la pelota al secretario general del PSOE, Maese Rubalcaba. ¿Alguna disculpa, alguna alusión negativa al motivo filoetarra del imaginario de Ordóñez acerca de Aguirre, tan omnipresente su rechazo en la Opinión Pública? Al contrario, le place ahora a Rubalcaba abundar en metáforas bovinas y en juntar ovejas y parejas por bandos bien señalados. Y Aguirre es para él, ex-ministro de Interior, claro, la “Thatcher española”.
“Lo que hace falta en Madrid es que llueva a cántaros… para BARRER a la derecha española,…hay que barrer el thatcherismo cañí de las Vistillas” bramó Rubalcaba en el Congreso del PSM. Diríase que es así como Maese Rubalcaba, profesoral siempre, moderniza al Señor de la UGT: cañí, de acuerdo, pero donde ponía el otro tardofranquismo pone él thatcherismo, coincidiendo y reiterando, una vez más, eso sí, en la obsesiva figura de la persona en que concentran los izquierdistas los denuestos.
Al día siguiente, y no era la primera vez, de nuevo un energúmeno violento aporreaba e incomodaba las puertas del domicilio de Aguirre. Que se entienda bien: no se sugiere ninguna relación entre ambos hechos, pero sí el que, en atención a estas circunstancias, debería el secretario general del PSOE y ex –ministro de Interior condenar esos hechos y deslindar con claridad los ámbitos de la rivalidad.
Cuando le escuché a Rubalcaba la parrafada de la lluvia y de la barrida, y la extrema acritud que en la misma él ponía, -que se le ve últimamente al Maese algo revuelto de gestos, diríamos- me recordó el desgarrador soliloquio del desquiciado protagonista de Taxi Driver:
“Algún día llegará una verdadera lluvia que limpiará las calles de esta escoria”.
Pero era esto sólo mi calenturienta imaginación cinera, ya tú sabes, lector mío. Cualquier parecido con la realidad, como sabemos, puritita coincidencia.
Quiero, una vez más, agradecer a cuantos leen mis textos el tiempo y la atención que me dedican, y sobre todo a aquellos que además me dejan su comentario. Me gustaría poseer más tiempo. Me siento en deuda con todos los que me leeis y me dejáis vuestra opinión. Un sincero abrazo a cada uno
ResponderEliminar¡Qué bien tiene que estar haciéndolo Esperanza Aguirre, cuando recibe tantos ataques de la izquierda!
ResponderEliminarUn cordial saludo bloguero.
Se está convirtiendo en "trending toppic" atacar las casas y las sedes de los líderes de las derechas...ay, cuánto se parece todo a lo que cuentas las memorias tan secuestradas de Niceto Alcalá-Zamora, los izquierdos siguen por donde solían.
ResponderEliminarY digo yo, señor bloguero, que su blog dícese denominarse de varios temas: política,literatura,cine y sociedad. Pocos comentarios de cine se leen, a pesar de la "imaginación cinera" que echa a sus temas políticos.Bueno que a mi me gustaria leerle más literatura y menos politica, pero entiendo que estamos en una etapa muy politica y que es un tema que vive usted muy directamnete. Y no se puede esperar más del Rubalcaba atosigador de sedes políticas. Saludos
ResponderEliminarLos ataques contra el PP ya no cogen a nadie por sorpresa, han atacado sedes, domicilios y sus políticos han sufrido encerronas.
ResponderEliminarLa izquierda radical, no tiene argumentos para defender y se dedican a ese tipo de atropellos.
Y por otro lado esta el Partido Socialista que en muchas ocasiones ni siquiera condena esos actos.
Saludos.
Más cañí, casposo y naftalino que estos sindicatos verticales no existe nada.
ResponderEliminarAdemás, a Tomás Gómez le iría bien lo de Pichi, ese chulo muy castizo, hasta las patillas a lo Luis Candelas, le acompañan.
tenemos que agradecerte que exista este blog Magnìfica la frase de Taxi Driver Ayer vi la pelicula del programa de De Prada que asemeja a toda èsta juventud rebelde pero sin causa
ResponderEliminarEste chico anda últimamente sacando mucho los pies del tiesto ¿por qué será? será porque en Madrid ganó Invictus a pesar de lo que él había ordenado, será porque perdió las elecciones con gran pérdida de diputados, será porque así distraerá al personal de recordar que él era vicepresidente del Gobierno de Rodríguez Zapatero los últimos siete años, será para que no le recuerden que como ministro de educación con Felipe González tuvo que lidiar con unas inmensas manifestaciones de estudiantes en las que apareció el ilustre prócer "el Cojo Mantecas"... será que tengo bad milk y mejor memoria...
ResponderEliminarY no creo que los blog sean para el invierno. Creo que son para cualquier estación, se ponga féisbuk o tuíter como se ponga.
Salu2
Basura y política... Algunas veces cuesta diferenciarlas (las palabras, digo..)
ResponderEliminarSaludos
Basura y política... Algunas veces cuesta diferenciarlas (las palabras, digo..)
ResponderEliminarSaludos
Que poca imaginacion tiene el Rubalcalva,Al comparar a Esperanza Aguirre con Margaret Thatcher,Eso lo dice cualquier iletrado de la extrema izquierda.Pobre hombre siempre repitiendo los viejisimos slogan,En fin son de un patetismo hiriente,un saludo y gracias por tu comentario a mi post del Lobo Estepario.
ResponderEliminarToda mi condena para los ataques que están recibiendo diferentes dirigentes y sedes del PP.
ResponderEliminarSaludos.
Las deudas, J.Antonio, son una reminiscencia mercantil de sentimientos de culpa fomentados por los programadores.
ResponderEliminarNo viajes con ellas, ni falta te hacen.
jnq
Bueno la ficción puede terminar convirtiéndose en realidad cuando gentucilla como Rubalcaba atiza los peores instintos de lo peor de su gente. Pero ya sabemos como son, acordaros de Wyoming.
ResponderEliminarSaluditos.