...Había iniciado en vano decenas de
relatos (costureras asesinas, heroicos inválidos acosados por nazis, yoncarras
descerebrados que apiolan a su vieja sin remordimiento…) yo que sé, esas tramas
trepidantes trufadas de malvados exóticos que secuestran tu imaginación
enfebrecida, niña. Pero nada me cuajaba. Cómo contarte entonces esta mañana tan
banal en que salí a cortarme el pelo, en que buscaba yo un harakiri light. Está bien,
me dije al fin, rápate si quieres, que te vas a agarrar una pulmonía, anormal, pero al
menos que lo haga una mujer, igual quedan retales narrativos por ahí, aunque
sean de géneros en rebajas.
¿Y si la realidad gris se transformaba en un reality? Algo así prometía ahora el microcosmos amarillista que
tenía delante. Yo creo que la blonda tiparraca de la pelu me caló desde el
primer momento. Vió con claridad el panoli que yo era y tras descender el
último peldaño, como si fuera un fardo molesto, me arrojó contra un sillón
marrón.
Tras sendos pisotones a un pedal que empequeñecieron mi figura más y
más, dejó bien claro ya que la única Sansona
allí era ella. Al momento, con una fulgurante revolera, maniatándome de paso,
apretó contra mi gaznate un mandilón a cuadros de unos colorones intolerables.
Aún podía verme en la pared de espejos biselados, una cabeza de chorlito con
gafotas que asomaba por encima del tapizado ideal de un maricaplayas.
-Oye, Mari Gloria, ¿no tienes
otro baby?, que uno es medio poeta, por favor.
Aquella
arpía lanzó una risotada. “¿Poeta? pues
abróchate la bragueta, ja, ja, já”. Bueno, pensé, al menos hemos roto el
hielo del odio que nos atenaza, Mari
Gloria me hará un buen rapado y punto, aquí paz y después… y después Mari Gloria. Sólo que ella ya había
recobrado su rictus desabrido. Me arrebató las gafas y las dejó en algún lugar
lejos de mi alcance. Cautivo en esa nebulosa, ignoraba por dónde podía salirme
aquella fiera...
CONTINUARÁ MAÑANA
LAS HISTORIAS DE UN BOBO CON ÍNFULAS
154 pgs, formato de 210x150 mm, cubiertas a color brillo, con solapas.
Precio del libro: 15 Euros. Gastos de envío por correo certificado incluidos en
España. Los interesados en adquirirlo escribidme por favor a josemp1961@yahoo.es
“No soy nada, no quiero ser nada, pero conmigo van todas las ilusiones
del mundo” (Pessoa)
Post/post: como decía, pondré solo un capítulo, que despierte de curiosidad el alma de las masas lectoras hacia el Mío Libro, y me lo compren. Solo inserta en la totalidad de la obra cobra su realce y significación, creo, este episodio. Gracias a CLAVE, a MAMUMA, a Andrés, a Mateo, a Mónica, a Winnie0, a Chela, a Zambullida por comentarme, por bloggear ayer a mi lado, GRACIAS.
Me gusta mucho como escribes, lenguaje culto pero a la vez intercalado con palabras "in" que dan un buen toque al humor de transfondo que se respira.
ResponderEliminarMe gustan también las fotos con que ilustras los posts. La anterior de la película "El marido de la peluquera", película francesa de grato recuerdo, en la que aparece un salón de peluquería similar al de tu descripción, y la de hoy de la película "Sansón y Dalila" en la que Dalila resulta ser una cruel "peluquera".
Un cordial saludo.
un acierto lo de Sansona saludos MATEO
ResponderEliminarMuy bueno todo el relato, a las mujeres les pasa igual, sentimos inseguridad al ver las tijeras, por muy conocida que sea la peluquera...saludos...
ResponderEliminarAh, entiendo, los que usted quiere es ponernos los dientes largos. Ahorraré y me compraré el suyo libro. Saludos
ResponderEliminarCon lo de raparse al dos me ha dado. Yo lo hago.
ResponderEliminarPensando en lo que usted escribió en su libro, creo que empezé a pelarme así hace años, cuando me dí cuenta que ya ninguna mujer me miraba. Sí, reconozco que hay algo masoca en mi visita mensual a la peluquería.
Mis íntimos no entienden ese corte que me hago, porque tengo el mismo manojo de pelo que tenía a los 20 años.
Me dejó usted pensando. Meteré el tema en la carpeta de "asuntos a estudir".
Hola, vengo del blog de MAMUMA tras leer su comentario sobre tu obra. Acojonante la situación peluqueril, habrá que ir al contexto.
ResponderEliminarSaludos.
Solo el título del libro ya me parece muy sugerente.
ResponderEliminar¡Muchas felicidades por este libro ! ¿Es el primero? Cuéntame. ¿Como empezó todo?
Un beso