Beben, brindan, brincan. No caben en sí de gozo, se les escucha casi el
himno de su humanista alegría. Que no se olvide, por Dios, incluso en el
éxtasis, el puño en alto y bien cerrado, esa alegoría de la verdadera
emancipación humana. Celebran la muerte de una mujer. Le dan vivas a esa
muerte. Festejan la muerte de la primera mujer que llegó a dirigir, durante
once años, el gobierno de una de las cunas de la Democracia. Era la hija de un
tendero, y qué. Bitch and witch, perra y bruja, eso es lo que ella era.
Llevan seguramente toda la Razón
consigo este tropel de entusiastas altruistas que piruetean alborozados nada más conocerse la
muerte de Margaret Thatcher. Maldita
tú seas, Thatcher, entre todas las
mujeres y por siempre maldita seas. Impediste con toda la carga del odio a lo
simplemente humano que en ti se albergaba, la plena reconciliación del hombre
con el hombre, la esencial fraternidad entre los Pueblos y sus gentes, la
simple posibilidad de un mañana que ese nombre merezca.
Maldita seas, Margaret Thatcher, una y mil veces maldita,
maldita tú y los tuyos, pues en compañía de un vaquero ultraderechista y de un
carca polaco le negásteis a lo humano su dimensión más esencial, trascendente y
poética. De no haber sido por vosotros, y así entonces esa dorada esperanza
ilusionaba con su luminosa inminencia al Mundo, la eterna bienaventuranza del
noble Comunismo reinaría ahora entre
la Humanidad, y ese Reino de la Libertad,
ese ubérrimo vergel donde la Vida y las Artes, y el Amor más Libre, por qué
no, florecería en insólita armonía, hasta
hacer de la existencia de las personas un puro bálsamo, en el que bien alta y
por doquier brillara la sana cooperación en paz y la fraternidad entre los
humanos, desconocidos ya el dolor y los sufrimientos, desterradas ya para
siempre la cizaña de la rivalidad y el egoísmo de los tenderos, sí, de los
tenderos capitalistas.
¿Acaso no vemos, no veíamos también entonces, como bajo el dulce manto
del Comunismo, los pueblos veneran a
sus líderes y no existen entre ellos los
Indignados? ¿Cómo podrían estos existir, allí donde la Injusticia ha sido erradicada, allí donde el Pueblo en Libertad continuamente bate plusmarcas de educación, de
sanidad, de prosperidad?
Ahora ya nadie se acuerda, pero entonces parecía dar el monstruoso Capitalismo sus últimas boqueadas, y
ante todos se abría la extraordinaria inminencia del comunismo, su innegable
superioridad moral, esa ventana de par en par abierta a la Hermandad de los
hombres y mujeres felices. Toda esa radiante promesa de esperanzado futuro la jodistéis
tú y los tuyos, Margaret Thatcher, bitch
and witch. Maldita seas por ello, Thatcher,
una y mil veces maldita tú seas.
LAS HISTORIAS DE UN BOBO CON ÍNFULAS
(Resumen de la obra en post del 27-1-2013 y 1-2-2013)
154 pgs, formato de 210x150 mm,
cubiertas a color brillo, con solapas. Precio del libro: 15 Euros. Gastos de envío por correo certificado incluidos en
España. Los interesados en adquirirlo escribidme por favor a josemp1961@yahoo.es
“No soy nada, no quiero ser nada, pero conmigo van todas las ilusiones
del mundo” (Pessoa)
Menudos aires de intelectual perdonavidas don Antonio, pa mi que va de sobrao en todo momento cuando, la verdad, debía de haberse dedicado a escribir la lista de la compra.
ResponderEliminarEs de un sarcasmo simple, además de resultar muy cansino; la ironía y el sarcasmo, cuando se carece de inteligencia, no es un arma digna de ser empleada en literatura. En mi humilde opinión el autor debería haber relegado estas cualidades que cree poseer a sus paginas noveladas y en papel, como ya indiqué, resulta cansino.
Además no cesa de pecar en los mismos aspectos que critica, es decir, el empleo de un pensamiento “eslogan” que no requiere ninguna clase de reflexión, algo muy manoseado por la izquierda pero que la derecha no se cansa de imitar, demostrando así que, como resulta obvio, en el plano cultural es la derecha la que se adapta a los moldes preestablecidos por la izquierda….
El tema de los progres puede dar muchísimo juego, pero el autor se queda en el cascarón, creando un tufillo casposo, de muy bajo nivel que puede resultar muy nocivo, debido a que al ofrecer un pensamiento trituradito, pasado por la batidora y que no exige ninguna clase de esfuerzo al lector, gran parte de este pensamiento (nocivo por definición, es decir, liberal) acabará siendo interiorizado por el lector medio, generalmente bastante imbécil para discernir. Lo de Pinochet no tiene nombre pero no caigamos en simplismos...La señora Tacher sera lo que se quiera pero de tonta ni un pelo...la escuela austriaca de economia ha muerto con ella gracias a los rescates al sistema financiero,lo de que viene el comunismo ya no cuela.
http://www.youtube.com/watch?v=mA02hsnQnhg
http://www.youtube.com/watch?v=nXpYXur5EbE
Ya lo dijo el otro día esa igualitaria (y antivida) Elisa Beni, que está esperando a que lleguen los "úteros externos" para hombres, de un día a otro (sic): "no me gustaba su manera masculina de gobernar". Pequeño detalle, por otro lado, que al degenerado Lorente se le escapara como el aceite en pravda, que Margaret declarara una guerra bien ganada a aquella pandilla. O que existieron nenas nazis y stalinistas en grandes dosis. Por no hablar de la abortadoras profesionales o de la serie "Gran reserva". En fin, tocaré el temita comme il faut.
ResponderEliminarLa culpa de que la izquierda estólida y abyecta campe por sus respetos la tiene esta insufrible derecha, que no se hace respetar, ni sabe hacer la o con un canuto. Solo sabe merodear por la feria vestida de negro.
Un saludo.
Que sucio queda las alegrías por un muert@, tenemos a pocas fecha la muerte de Hugo Chaves y supongo que también bebieron para celebrarlo, lo veo igual de sucio y degradante. De todo hay y no seré yo quien de lecciones de comportamientos, pero repito ¡¡ que sucio !!...saludos...
ResponderEliminarDing Dong!
ResponderEliminarLa bruja ha muerto!
¿Cuál bruja? la bruja malvada!
Ding Dong la bruja ha muerto!
¡Despierta, dormilón!
Se frota los ojos, levantarse de la cama!
Despierta, la malvada bruja ha muerto!
Se ha ido donde los duendes ir,
Abajo, abajo, abajo!
Yo ho!
Vamos a abrir y cantar,
Y las campanas suenan!
Ding dong, el alegre-o!
Cantar en alto, cantar bajo!
Hágales saber que la malvada bruja ha muerto!