lunes, 12 de diciembre de 2016

En la espera... fragmento de "Quisimos tanto a Iker"





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FRAGMENTO DE "QUISIMOS TANTO A IKER ", uno de estos:
"...En medio de la tufarada de azufre y los hachones de violenta luz roja que exhalaban las bengalas, bajo una lluvia de confetis blancos que no sé desde dónde caían sobre nosotros, justo en el mismo momento en que Iker, como capitán, enseñoreaba al mundo entero la gran Copa, Beatriz se levantó, y de espaldas a cuanto ocurría sobre la hierba, buscó mis ojos sin rebozo, miró luego en torno mío, como si buscara en mí el aura resplandeciente de una presencia sobrenatural, pobre de mí, tan sólo un perdido aprendiz de poeta posmoderno, un poeta de la inexperiencia al que hasta entonces todo le rimaba mal en la vida y que ya sólo despachaba cervezas amargas en un bar de Alcorcón. Pero es que acabábamos de ganar la Décima, y muy pronto, dentro y fuera a un tiempo de todo aquello, nos besábamos por toda la cara, primero con los labios y luego con los ojos. Sí, nos besábamos con los ojos cerrados, con ellos por todos los confines de nuestro rostro, demorándonos en ello, dos completos desconocidos de bruces allí. Así nuestras lágrimas se unieron, lágrimas radiantes tiznadas de pintura blanca, como mi cara, y ya volvimos juntos a Madrid esa noche en el autocar. Esa noche. Pese a que aún sólo acertabas a enhebrar monosílabos, no soltabas mi mano, y qué falta nos hacía nada más. Ya nunca nos separamos, Beatriz...". 

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