sábado, 19 de octubre de 2019

Otoño en las manos

La imagen puede contener: personas sentadas, árbol, planta, exterior y naturaleza
No hay descripción de la foto disponible.

Manos del otoño
bancos de la memoria
hojas que bailotean con el viento...
sendero de la melancolía
tu boca y la mía
uff, cómo ardían...
por aquellos días.

¿Habrá libro de poemas? Este año, no, ni el que viene, eso es fijo. ¿Y después? Me encantaría, pero... necesito antes que más amigas/os aquí me soliciten mis 111 ROSAS… o mis versos en agua de borrajas quedarán, en efusiones que valen nada.

UNO, 12 E, DOS, 20 E, ENVÍO POR CORREO CERTIFICADO INCLUIDO. CONTÁCTAME AQUÍ o en josemp1961@yahoo.es

ESTA ES MI TRILOGÍA DE LAS ILUSIONES: humor, aventuras cotidianas, sentimientos a raudales

111 ROSAS o EL LIBRO DE LAS AGRIDULZURAS. 301 pgs.
Un cincuentón a la busca de sí mismo y de los otros, a la búsqueda de los afectos prohibidos, por cielos, mares y Antros, entre mujeres fatales y magistrales. Te reirás. Te dará que pensar. Te emocionará.
LAS HISTORIAS DE UN BOBO CON ÍNFULAS. A Armando, un cuarentón de clase media, un buen día su mujer le señala la puerta de salida de casa. Ella ha encontrado a otro más alto, más fuerte y más guapo que él. “Aprende a quererte y los demás te querrán”, le sentencia. Descubre entonces Armando, de golpe, su minusvalía emocional: un paria en la tierra de los afectos. Ha de salir al mundo; a un mundo, que por temperamento, le es ancho y ajeno. Cómo superar su desconcierto, cómo sobrellevar esa zozobra, cómo suturar la herida… Cómo aprender a re-armarse como persona. En las asombrosas peripecias humorísticas, librescas y sentimentales que le suceden… ¿hallará siquiera a medias Armando su lugar al sol? 154 pgs
VEINTE RELATOS DE AMOR Y UNA POESÍA INESPERADA: una creativa indagación sobre la condición humana enamorada, con la narración de las emocionantes encrucijadas a que nos arrojan los sentimientos inevitables 165 pgs.

2 comentarios:

  1. Los poemas no se escriben cuando uno quiere; se escriben cuando quieren ellos.
    Así que, ellos mandan.


    Un beso poético.

    ResponderEliminar