Después del aldabonazo filosófico que Trueba asestó el otro día en El Mundo será difícil que la Historia de la Filosofía Política, el progresivo decantado de la reflexión y del conocimiento sobre las diversas teorías de gobierno desde Pericles para acá, vuelvan a ser las mismas. No es de extrañar que los colegas de la Academia hayan decidido deprisa deprisa laurearle con un nuevo Goya, que debe tener el Señor la casa poblada de Goyas, como Hearst la tenía de vírgenes románicas.
“Todas las dictaduras para mí son de derechas. Nadie que diga que es de izquierdas o revolucionario tiene a la gente sojuzgada. Eso es reaccionario. Lo revolucionario es considerar a los seres humanos libres y capaces de dirigir sus vidas”. Debería haber tal vez añadido, ¿vale?, a la usanza belenestebanesca, tan admirada por nuestra ministra de Cultura, y cerrar con tan magnífico bordón para siempre siglos de especulación de las más esclarecidas mentes acerca de la naturaleza y alcance del Poder.
Twitteaba el otro día Vigalondo que el Holocausto fue un montaje. También lo de Trueba parece cosa de twitteo, en el sentido de chusca infantilada, de esos arreglitos verbales que los niños mimados apañan cuando quieren llevar razón a toda costa y por encima de la realidad. Igual que un Dios airado pone Trueba el nombre a las cosas según a él se le antoja: dictadura y opresión igual a DERECHA; democracia y libertad, igual a IZQUIERDA. Es esa querencia totalitaria a lo Gran Hermano orwelliano que late siempre en la Izquierdorra: yo titulo la realidad según me conviene. ¿Vale?
Ministro Gabilondo, vaya tomando nota de la soberbia lección de Trueba, ese nuevo Platón, para el temario de la Educación para la Ciudadanía. (Cuando el suyo fratello le repartía hostias en la infancia, aquel Pan negro, era gabilondo de derechas, vamos, que no era Gabilondo, era la Bestia). Y punto. Lo que no nos gusta se lo endiñamos al adversario y se acabó. A salvo siempre, claro, y es lo decisivo, la bondad incuestionable de la propia conciencia y la superioridad moral indiscutible de nuestra tribu. Podía por las mismas decir que todos los violadores son de Derechas.
Decíamos, al glosarle a Vigalondo, cuánto ha degenerado el nivel argumentativo e intelectual de los santones progres de la cultura y la prosperidad. También dáse en Trueba esa fruición regresiva por el vulgarote exabrupto: “el cine español es un montón de mierda”, decía hace poco Trueba, como todo un Gil y Gil; el acceso que hay en Cuba a la educación parécele al revolucionario señor… “cojonudo”. Así se habla, sí señor, como mandan los cánones triunfantes del Reinado de la Mugre: el sábado por la noche, el formidable comunicador de La Noria, para justificar que en un twitteo, al sentirse aludido como telebasura, le mentara “tu puta madre, guapa” a quien se lo reprochara, se disculpó con un “la cagué”, que a nadie ya incomoda, pues esa coprofilia infantiloide tan en boga gran Progreso sin dudarlo nos dictan ellos que es. Decíamos entonces, para ilustrar el retroceso bárbaro de la cultura a manos precisamente de los que dicen de sí adorarla, cuánto va de Adorno a Vigalondo; ahora todo lo que separa a Sartre de Trueba.
Obsérvese de paso la santa bula que el ser alto cofrade de la Ceja Nostra otorga: si Trueba, ese Kant redivivo, describe al hispano cine en su mayoría cual soberbia pila excrementicia –que recibe más subvenciones que ingresos recauda- ningún sambenito habrá de arrostrar. Al contrario, un nuevo Goya de inmediato le cae, por más que acapare ya él Goyas a montón. Dígalo usted y verá cómo de enemigo del mismo género humano muy pronto le invisten. Ahh, qué risible teniente de la Nomenklatura soviética haría Billy Wilder con el oscarizado señor Trueba.
Aseguraba hace poco Trueba que, en vista de que la ley Sinde no le protege, andaba “contemplando muy seriamente la posibilidad de hacerme objetor fiscal”, visionaria meditación donde las haya, y que muy revolucionaria ha de ser, pues a los dos días aseguró la ministra Sinde que ella “respetaría” la truebiana insumisión. Vale. ¿No podrían ya ir preparándole otro Goya más a Fernando Trueba?
José Antonio, ese tío delira...que le den un Goya??...ya puestos que le den...en su sentido más genuino. Te he enlazado, que no sabía hacerlo. Voy saliendo de la torpeza técnica. Un abrazo.
ResponderEliminarEsa rabiosa y pérfida jactancia sojuzgadora es lo que mejor define a la izquierda. Dicho de otra manera, con el conocido paradigma troskysta: "lo mío es mío y lo tuyo también". Es decir, la izquierda, invariablemente, siempre se arroga la potestad de dictaminar lo caprichosa que debe ser su ególatra veleidad liberticida, para que sus integrantes dispongan a discreción de la capacidad de dirigir sus vidas, haciendo para ello todo el mal que se encarte. En la libertad de la izquierda, siempre el fin justifica los medios. Es puro fascismo de izquierdas el que plantea este adalid de la Cosa Nostra, en su sección sindical de la Secta Ceja.
ResponderEliminarEs lo que tiene la cabezonería, amigo del Pozo, que el sostenella y no enmendala desemboca en el ridículo. ¿Subvencionado?
ResponderEliminarUn abarzo
Jose Antonio, si ya lo dice el dicho: "donde pone el ojo, pone la bala", y así se explica la cosa...
ResponderEliminarMejor dedicar la atención a personas más capaces. Este señor no merece el tiempo que empleaste en él. ¿A los perrillos muleros del camino? VALE.
ResponderEliminarSer de derechas o ser de izquierdas, es una manera de pensar, las neuronas se conectan como pueden debido a una serie de motivaciones de las que el individuo no es responsable. Por eso cada cual piensa como piensa y así se le respeta o se le debe respetar.
ResponderEliminarLos imbéciles, los asesinos, los dictadores los malvados, no son patrimonio de las derechas o las izquierdas, ni de una nacionalidad u otra. Ellos son patrimonio de la Humanidad.
Como la derecha española que hoy nos amenaza. España les importa nada, ellos van a lo suyo.
Y esto sí que es una verdad como una catedral así de grande.
Ruego me disculpen si no soy demasiado técnica. No soy licenciada en Ciencias políticas como mi admirado Jose antonio del Pozo.
Magistral entrada J. A.
Trueba, como el cine español es un montón de mierda, no pienses que vamos a pagar un duro por ver tus pelis, quédatelas para ti solito. Cuando yo creo algo, lo hago con la firme convicción de que debo compartirlo, porque la belleza se expresa para ser admirada. Así entiendo que tus pelis sean moñigas y los Goyas una parafernalia, no goyesca, sino gilipollesca, en la que engordan egos como el tuyo y desmerecen lo realmente bello del cine español, que hay mucho!
ResponderEliminarPoeta JOSE, eres grande.
ResponderEliminar-Y hoy también de gran tino.Me parece no solo oportuno,sino obligado mostrar ciertos comportamientos,ciertas conductas,ciertas expresiones de señores tan encantados de haberse conocido y que resulta indignante por INCREIBLE que se manejen así.Trueba,Vigalondo,Jordi González...anda y qué les dén.
saludos.
Dña Tecla, usted lo ha expresado perfectamente, no tiene porqué disculparse. Jamás quito mérito a la literatura de José Antonio, que a veces también nos trae personajes de otro pelo. Aunque, es verdad, le privan más los gilipollas progres que los otros gilipollas. Y él me responderá sin duda....!es que hay más por metro cuadrado! Y yo no lo sé, son incontables los de ambos bandos.
ResponderEliminarPero hay que aceptarlo, no vamos a renegar de Borges porque un día apoyó a los militares. El, en conciencia pensó que era lo mejor en ese momento.
Y además José Antonio ha dado sobradas muestras de ser un demócrata convencido; eso sí, le molestan los falsos progres. Como a mí. Y los falsos de los demás.
Saludos!
-Sinretorno: muchas gracias, amigo, por enlazar il mío blog al tuyo.¿Y si te digo que yo no tengo ni idea de cómo se hace eso? Un saludo
ResponderEliminar-Juante:yo creo, como apuntas, que cierta impostura debe ser criticada. No es de recibo decir que porque a el le da la gana todas las dictaduras son de derechas
-Javir: yes, subvencionated, amigo mío
-Maribel: es su belle epoque particular
-Antonio José Alcalá:y el caso es que algunas de sus pelis son muy buenas. Genial, lo de los perrillos.
-Tecla:el sentir tendrá en cada uno los motivos biográficos y de todo tipo que lo expliquen, los nuestros y los de quienes sientan distinto a nosotros, pero el pensar debe tender, creo, a ser sometido a razón, es decir, a crítica, a ponderación de argumentos.Tu misma dices, contradiciendo a Trueba, que dictadores no son patrimonio de nadie. Pues eso.Dices que la derecha española nos amenaza, que España no les importa y que eso es verdad como catedral.Te invito a que lo expliques. El ser licenciado en algo tampoco es garantía de infalibilidad.Tambien yo te admiro. Gracias
-Misón:es que cuando se dicen cosas como las de Trueba, en las que la Ceja abunda, expulsan a medio país de sus películas.No querrán luego que además de pagárselas se las riamos. Hemos ido hacia atrás, al menos antes se decía, todas las dictaduras son malas.
-Roy:ya te digo, yo creo que en sensibilidad y en finura democrática vamos patrás. Gracias, tronk.
-Cesar:No lo sé, yo creo que los síndicos de la Ceja sientan cátedra y desde hace años manejan el establishment cultural, puedo estar equivocado. Tú insistes en la equidistancia de ambos "bandos" y yo no estoy de acuerdo en eso. Es el acorazado Potemkin contra cuatro mataos de Pancho Villa. A Borges, como a Sábato -que también en su día quiso a los milicos-, se les pueden celebrar algunas de sus obras, pero sus opiniones erróneas deben censurárselas. Pero lo que consiguen las salidas de pata de banco como las de Trueba es que nos hagamos todos menos demócratas. Saludos
ResponderEliminarNo, no hablo de equidistancias, simplemente digo que son incontables en ambos bandos. Los que salen en los medios hacen más ruido, parecen más. Pero Trueba, por poner, es sólo uno, por más que ladre y por más que parezca que mueve montañas.
ResponderEliminarJosé Antonio, ten más cuidado con aquel que no ladra. Hablo de perros.
Saludos.
Coincido en parte con Tecla en que las emociones nos orientan hacia una determinada tendencia y en que hay panolis y sinvergüenzas en todas ellas; también honrados y admirables. De todo como en botica.
ResponderEliminarPero cuando uno pontifica (v.gr el Sr. Trueba) no ha de hacerlo con el corazón (sístema límbico) sino con la razón (cortex frontal). Esa es la que le ha faltado al oscarizado-goyizado probablemente porque suponga (y con él algunos otros) que ser famoso y tener acceso a los medios otorga patente de corso. Peor para ellos pues con su prepotencia y falta reflexión caen en un evidente ridículo.
Felicidades José Antonio, no sé cómo he podido pasar una semana sin leer tus crónicas. Un abrazo Á.
-Cesar:en fin, me temo que habrá motivos en el día a día para abundar más en el tema y de paso ir exponiendo cada uno nuestras razones.
ResponderEliminar-Ángeles:por supuesto que en todas partes cuecen habas, y en algunas calderadas. Yo respeto los motivos sentimentales y biográficos que impulsan a la gente a sentir de una manera, pero para que sea pensamiento hay que tamizarlo a través de la Razón y debate argumentado. Sí, esas palabras de Trueba me parecen penosas. Gracias, Ángeles por trasladarme la afición que le tienes a mis crónicas,son las Crónicas de Nadie, eres tan gentil. Otro.
¡Hombre, José Antonio, que hace tiempo que el llamado mundo de la cultura demostró que no sabe ni tiene cultura. Con que veas Pasapalabra te darás cuenta de la ayuda "curturah" que ofrecen los acompañantes del sufrido concursante. Lamentablemente se ha confundido la cultura con los comediantes. O sea, CIENCIA y ARTE con cómicos de la legua que antes tenían vetada la entrada en los pueblos por ladrones. Stephen Hawking o Javier Reverte son personajes de la cultura; cantantes o actores puede que tengan cultura o puede que normalmente no la tengan
ResponderEliminarSalu2