Podrá la tecnócrata ministra italiana explotar en llanto al anunciar lo que nos espera, podrán las camarillas sindicales y la izquierda dura anunciar movilizaciones ante el inevitable deterioro del Estado del Bienestar, podrá la desesperanza colectiva echar sus redes por la casi totalidad del escenario social, pero el sabio Punset nos vende con su nuevo libro un “Viaje al optimismo”, que de esa misma manera se intitula. Lleva además el libro un subtítulo más atronador todavía: “Nos sobran razones para pensar en un futuro mejor”.
Recapitulemos: primero nos vendió la Nintendo, luego, en un receso como jurado de los Príncipes de Asturias, jaleó a los furibundos anticapitalistas de la Santa Indignación en la plaza de la Escandalera de Oviedo, “No paréis”, les exhortó allí; más tarde nos atiborró a multinacional pan Bimbo, “todo natural, nada artificial” tintineaba el slógan; después, cuando el 15-0, anunció que pensaba él lanzarse también a las calles, un Indignado de los más, y ahora, en navideñas vísperas casi… ahora toca colocar libro, libro en la senda del optimismo antropológico. Decíamos ayer: es verdad, cada vez los escritores ricos son más ricos, y los pobres escritores, más pobres. Sólo que aquellos, sabios que son, disfránzase cuando conviene de estos. Para que a estos ni se les vea.
“El pasado fue siempre peor… (oíganlo bien, anticapitalistas de toda laya, lo dice el sabio Punset, no el muá) …y no hay duda de que el futuro será mejor”, así apostrofa en su optimismo viajante. Y ese tono apodíctico, indiscutible, zaratustro, esa palomita blanca ¿de qué bolsillo se la sacará precisamente ahora Punset?
Aporta Punset en el encarte publicitario del libro algunas de sus razones: 1) “no existe una crisis económica planetaria, existe una crisis específica de países específicos” (muy cierto, pero eso a quien sobre todo debiera decírselo es a los Indignados, tan proclives en su idealismo al Apocalipsis planetario); 2) “la esperanza de vida aumenta 2,5 años cada década” (sin duda un dato decisivo éste, que recusaría de cuajo el pretendido carácter genocida del capitalismo). 3) “en tiempo de crisis la manada se vuelve hacia los jóvenes para que ejerzan su liderazgo. No pueden defraudar” (pero ese es un topicazo de saldo, las juventudes pueden ser hitlerianas, maoístas, budistas, pasotas, incluso nintendistas y no es lo mismo, qué es eso de que éstas “no pueden defraudar”, más allá de un gemido adolescente; en fin, lo de la manada es de una vulgaridad divulgativa que tira de espaldas, ni el Reader Digest. 4) Nunca habíamos sabido tanto sobre la felicidad (está en la sala de espera de la misma) y sobre la belleza (“la que refleja un rostro con un nivel de fluctuaciones asimétricas inferior al normal”, el mío, ¿lo ves? parece entreleerse tras la “poética” punsetiana).
Acabáramos: de creer a Punset, si compramos su libro (mezcla en hamburguesa de autoayuda triturada a las finas hierbas editoriales más el ketchup del culto a la propia personalidad) seremos más bellos, esto es, más punsetianos y más felices, y comeremos… pan Bimbo, “todo natural, nada artificial”, remember. No pares, Punset, no pares.
Decía el otro día el progre nada sospechoso Antonio Muñoz Molina a la jóvena filozapatétrica Isa Gemio: "que yo sepa, la juventud es una etapa de la vida y no una categoría. Considerarla categoría, como se hace en España, es puro papanatismo". Punset es un perfecto papanatas y más papista que su papa, ZarraPastroso. Encima, sus achaques bobalicones reúnen en indignante cóctel todo lo peor que se pueda exhibir impúdicamente cuando se ejerce obscenamente de palanganero de un régimen que no se sostiene, como no sea con el beneplácito del liberalón y santo "San Tander".
ResponderEliminarÍtem más. Haciendo abstracción de una segunda parte de una imaginaria segunda república del desarrollismo "nacionalaicista", para la progresía sólo existe el futuro. Obvio, ya que carece de sentido de la realidad e incluso de la compasión por los pobres.
Un abrazo, amigo.
¡Ay, José! ¡Qué malvadete me eres! ¿Cómo no entras dentro de la filosofía punsetiana, hombre? con lo feliz que serías, más guapo, con menos colesterol... Si es que eres un nihilista.
ResponderEliminarSalu2
gracias, Juante, Juan Carlos
ResponderEliminarGRACIAS a todos los que me leen, se hacen seguidores míos, me dejan su reflexión. Siempre me hacen pensar, estén o no de acuerdo conmigo.Y sobre todo me animan a seguir escribiendo. GRACIAS
No lo he leído, pero este tipo tiene libros muy buenos. Al menos se preocupa por la divulgación científica. No está de más cuando la mayoría no sabe ni lo que es la ciencia.
ResponderEliminarSaludos.
Yo, mientras no lo confirme Blasa...
ResponderEliminar¡Salud y forza al canut!
es muy dificil el llegar a comprender a este individuo de Eduardo pero si te dejas sumergir en sus escritos algo te deja tocado en alguna parte ....como todo maxmedia no dice lo que sabe pero deja caer mucho Jose Antonio un abrazo
ResponderEliminarAh, por fin un uppercut al santo Punset. Aquel que intentó hacer ver que la ciencia no tenía límites, pero en tono para el gran público atontado, público mermado precisamente por la maquinaria de la ciencia desbocada y destructiva.
ResponderEliminarGracias!
Buen artículo como de costumbre y muy irónico. Personalmente no alcanzo a comprender porqué Punset tiene esa fama de "sabio"...eso de que cualquier tiempo pasado fue peor y el futuro será aún mejor representa a la perfección el obtuso optimismo de esta sociedad, que se considera a sí misma la culminación de la historia humana.
ResponderEliminarQuizá el señor Punset nos explique porqué en vez de Cervantes, Quevedo y Shakespeare tenemos a Carlos Ruiz Zafón y bodrios de vampiros, porqué en vez de Bach, Beethoven y danzs populares tenemos ruidos semianimalescos, porqué en vez de Velázquez y El Greco tenemos latas de Coca-Cola y exposiciones de excrementos de artista enlatados, porqué en vez del teatro clásico tenemos la telebasura y los programas de marujeo, o también porqué en vez de Platón o Aristóteles tenemos al mismo Punset.
"Cualquier tiempo pasado fue peor"...uno no sabe si reír o llorar.
el gurruchaga !!!!!!!!!
ResponderEliminarque recuerdos.................!
jnq
Muy bueno.
ResponderEliminarUn saludo.
Quizás (siendo "bueno")Punset tenga razón si tomamos cómo referencia el cómputo total de la población y como estado del bienestar datos como "vivir más". Pero la calidad de vida va a peor, al menos en occidente y sobre todo hay un dato que olvida: La libertad y autonomías personales: Punset pinta un mundo mejor (y quizás tiene razón) pero un mundo del tipo "La fuga de Logan", una sociedad robotizada, controlada, un hormiguero vamos.
ResponderEliminarDe otro lado eso de que en tiempos de crisis miramos a la juventud y que no pueden defraudar...Que se lo pregunten al POSOE de Zapatero
Nada es mas peligroso que un optimitas desmedido,un saludo.
ResponderEliminar