Y la rosa se me adelantó, normal. Rosa
Benito, esa rosa del Sálvame,
vió antes que yo cumplido su sueño: le han publicado a ella su libro. ¿De
recetas de cocina, con la ayudita de un chef? Y qué, si sobre eso se pueden
también escribir muy divinas delicatessen. Además que, aunque ya lo había
presentado en las pasadas navidades, estiró ella la impronta de su poderío
escritor y como una Reina triunfó todavía en la reciente Feria del Libro. Las masas populares es que se agolpaban jubilosas
frente a su chiringuito. Hasta el Japón
conoce ya la versión de esta rosa.
No creas, lector, a mí no me parece nada mal que Rosa Benito por todo lo alto reine en la Feria. Que les dé allí
sopas con hondas a esa panda de importanciosos Escritores Profesionales, Superprogresistas
casi todos, que dicen con su alma entera aborrecer el Mercado y la libre economía, y que humillan luego de lo lindo el morrillo ante
la Industria, como muñecotes de caseta a quienes la plebe allí incluso osa lanzar
pullas como bolas de trapo, y que, eso sí, no olvidan jamás pillar su
buen cacho del perol. Rosa Benito
ganó el lío ese de “Supervivientes”
y ahora se pasa por la piedra a los Consagrados
Autores en la Feria. Reallity shows
ambos, triunfante la Rosa, no la toquemos más.
Óyeme, Rosa Benito, delicada
flor de nuestras vidas, perpetua rosa de todas las estaciones: ahora que
arrasan los libros de pornografía para mujeres casadas, me ofrezco yo a ser tu
negro. Como lo oyes. Yo, esta nada bloguera, tu negro. Pongo desde ya a tu
capricho el mango contumaz de mi escritura. Mira, me cuentas tú cuatro batallas
de la isla aquella y, en menos que canta un Jorge Javier, te pormenorizo yo el best-seller del año, con las
idas y venidas, las metidas y sacadas, las felaciones y las porculizaciones que
se tercien con Montalvo, con Leticia Sabater y con el Gorila de la isla, si es el caso y es lo
que los mandarines de la Industria
Cultural tienen a bien ordenar.
Que además te digo: eso del sol y las olas, de la ardiente playa, los
cocoteros en flor, el viento del mar y las hamacas entre palmeras ondulantes
bajo inverosímiles crepúsculos fucsias, son escenario muy sugestivo para las
mayores aberraciones del Deseo desatado. Y podría yo ahí desarrollarte pero que
unas muy vibrantes fornicaciones. Quedo pues
ya, besando tus pies sin espinas, a lo que tú me mandes querida Rosa Benito. Sálvame tú un poco, anda,
rosa de todos.
ROSA BENITO FIRMA LIBROS por Lydia_ClubdeFans
Aquí querido hasta el mas tonto hace relojes, pero no se de que te extrañas. Zp también va a escribir dos.
ResponderEliminarNo la soporto José Antonio!!!!!! un besito
ResponderEliminarJajajaja......lo que nos quedará por ver....
ResponderEliminarYo me paso al futbol , de verdad...
Los famosos les escriben los libros los escritores que llaman "negros" si no me equivoco. Lo mismo sucedió a Ana Rosa, no hay como ser conocido para que caigan habas. Y uno aquí que publica un libro con el sudor de sus deditos tos picaos del teclado, ayssssssssss
ResponderEliminarUn beso y gracias por llegar a mi tierra de letras