Era Aznar, por absoluta mayoría popular, presidente del gobierno de
España en ejercicio. Según se ha revelado en el juicio del caso Noós, el modélico Duque
de Palma envió entonces a su esposa, la
Infanta Cristina, un correo que contenía un muy cáustico fotomontaje en el
que una contrariada Ana Botella sostenía
en brazos a un bigotudo bebé con la viva efigie de Aznar sobreimpresa. La leyenda de acompañamiento rezaba: ¿Te
imaginas? NO A LA CLONACIÓN.
En otro correo que poco después el
ejemplar Duque a su esposa remitió, el fotomontaje en cuestión rezaba un “aquí está el guiri”, bajo el que de
nuevo de lo lindo salía ridiculizado el en ejercicio presidente Aznar. Hay constancia aún de otro
correo más, en el que consistía la mofa en un fichero con el nombre “Aznar” que
el destinatario debía inexcusablemente enviar a la papelera. El sistema
preguntaba entonces: “¿Desea eliminar a
Aznar?”, a lo que el usuario había de contestar Sí.
La reiteración en la burla ducal revela a las claras, a mi juicio, la
cómplice animadversión que entrambos hablantes se profesaba hacia la figura del
Presidente del gobierno entonces. No sabemos, claro, si esa visión denigratoria de Aznar, líder de la Derecha
española en aquel momento, era extensible a toda la Familia Real, aunque es
conocida la frialdad de esas relaciones, en clamoroso contraste con el
hiperbólico ditirambo que de Zapatero
presidente el mismo Rey en público hiciera. No consta, por otra parte, en los
correos del sumario Noós, creo, ninguna otra befa semejante con, y mira que a
patadas los hay, absolutamente ningún otro personaje político vituperable, lo
que acentúa el relieve y la significación de los mismos.
¿Es exagerado afirmar que, de haberse hallado difamantes caricaturas
tales con –digamos- Rubalcaba en el Poder de protagonista, en horas veinticuatro
habríamos visto a la Familia Real en pleno con las maletas caminito… del
exilio?
A las vueltas de las corruptelas del Duque em-palma-do, y de la posible implicación en las mismas de la Infanta Cristina, resulta todo un
sangrante sarcasmo que, por responsabilidad institucional, sea precisamente la Derecha española en el gobierno
quien, a través de las burdas patrañas de Montoro
y Margallo, se halle enfangada, con el incalculable coste añadido en
términos de la imagen que entre los ciudadanos se da y queda para muchas
elecciones, en la tarea de literalmente salvarle el
trasero a su Alteza la Infanta, que tanto al parecer se cachondeaba en privado
del elegido por la mayoría entonces como Presidente. Cornudos y apaleados, una vez más, sí.
LAS HISTORIAS DE UN BOBO CON ÍNFULAS
(Resumen de la obra en post del 27-1-2013 y 1-2-2013)
154 pgs, formato de 210x150 mm,
cubiertas a color brillo, con solapas. Precio del libro: 15 Euros. Gastos de envío por correo certificado incluidos en
España. Los interesados en adquirirlo escribidme por favor a josemp1961@yahoo.es
“No soy nada, no quiero ser nada, pero conmigo van todas las ilusiones
del mundo” (Pessoa)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarSi, es muy feo que el irreprochable Duque de Palma, hable mal siquiera del Estrangulador de Boston. De entre las muchas cosas que no me gustan de Aznar, destaco dos sobre todas: lo mal que juega a Pádel y lo horrendo que le queda el jersey en los hombros. Y desde luego aprecio en él el alto concepto que tiene de la familia. La familia lo primero y en el más alto lugar. Y de los amigos. Es amigo de sus amigos y sus amigos, por supuesto le corresponden.
ResponderEliminar