-¿A que te gustaría ser un empotrador, ¿eh? Tienen su público, no creas.
-Lo sé. Pero no. Ni hablar. En todo caso yo sería un encofrador.
-¿Cómorrr?
-Yes, más que incrustar, o que encastrar, lo mío sería encofrar, esto es, hacer del cuerpo de la amada, y ella del mío, claro, un cofre, un recinto ignoto y sagrado que descubrir al fondo de un mar muy azul, y abrir y desplegar en él y de él monedas de oro y pepitas de rubíes encendidos, y copas y pendientes refulgentes y piedrecitas muy preciosas.
-Me parece entonces que, con esos planteamientos, al First Dates no te vamos a llevar.
-No, si ya, ya sé que así nunca tendré tras de mí un público.
-Es lo que hay.
-Mas tendré conmigo personas.
SOY ESCRITOR. EL ALGORITMO DE LOS BESOS TRUNCADOS. 152 pgs, 10 e, envío por correo ordinario incluido. Si quieres impulsar mi escritura, pídemelo aquí o en josemp1961@yahoo.es. Aquí te esperan los paisajes y episodios esenciales de un alma sentimental, acaso la tuya también, un alma romántica… y dulcificada por la ironía y por el cántaro del tiempo. Versos y besos, reversos y rebesos, reveses y timideces, amoríos y achuchones, desengaños e ilusiones, epifanías y adioses, tristezas y alegrías… la vie en rose y la vie en bleu, en blue y en blues, la bellezza en paspartú… Toda la ternura que puedas imaginar tú.
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