"...Nos repartíamos entonces el flash, nuestra ambrosía de héroes homéricos extenuados, la misma que nos elevaba a un dulce nirvana, eso es, los flashes vamos, aquella agua congelada en un plástico con polvitos de colores pirotécnicos: de naranja, de limón, de coca-cola, ah, los flashes de menta, ese hielo verde pippermint, el mismo verde de los ojos de Paula, qué sabor tan sofisticado y amargo al principio, qué ricos y qué refrescantes los flashes, por mucho que nuestras madres se empeñaran en decirnos que eran malísimos para las anginas...". (página 95 de mis 111 ROSAS)
#LeerLeerLeerEsUnGranPlacer Mis 111 Rosas -301 pgs, humor, aventuras, sentimientos, 10 e envío incluido- son como un sueño bonito. Contáctame
No hay comentarios:
Publicar un comentario