Claro que el Rey de España, símbolo de la unidad y permanencia de la Nación
española, debe sajar y atajar del todo cuanta sombra de corrupción pueda
también a él y a su Casa alcanzarle. Y por supuesto que debe su actuación resultar ejemplar
y útil a los ojos de los ciudadanos. Rex eris si recta facies, si non facies non eris,
que decía el clásico que estudiábamos allá en el rancho grande. Que de
no ser así, su suerte estará más que echada. Pero tampoco debe ocultársele a
nadie, a ninguna persona avisada y responsable, todo el que deteste el caos
para su nación puede ignorar que el establecimiento de una República ahora, dada la cultura política en nuestro país
dominante, dada la hondura y la gravedad de las querellas de todo tipo que a
nuestra nación asolan, sólo podría ser el principio del dramático precipicio
por el que a tumba abierta todos de hoz y coz nos arrojaríamos.
Primero que quién. Y luego que,
pasados tres meses, los unos, los otros, Maroto y el de la moto, más el resto de los hunos, que diría Unamuno, lo
habríamos convertido en un inútil pelele. Todos los diques institucionales de autocontención
y de una mínima unión, los mínimos lugares de un precario punto de encuentro,
estarían ya del todo arrumbados. Sería imposible después –cualquier observador
imparcial y templado debería preverlo- volver a tapar esa caja de violencia, con todos los
males como locos ya desatados. Que al menos también en este infeliz blog, en el
que caben todo y nada, quede escrito.
LAS HISTORIAS DE UN BOBO CON ÍNFULAS (Resumen de la obra en post del 27-1-2013
y 1-2-2013)
154 pgs, formato de 210x150 mm,
cubiertas a color brillo, con solapas. Precio del libro: 15 Euros. Gastos de envío por correo certificado incluidos en
España. Los interesados en adquirirlo escribidme por favor a josemp1961@yahoo.es
“No soy nada, no quiero ser nada, pero conmigo van todas las ilusiones
del mundo” (Pessoa)
3 comentarios:
Bueno, sí. Como mal menor, acepto y comparto la reflexión sobre este pueblo tan jactancioso de cainita.
Saludos en el día de San Schopenhauer.
Estamos jugando con las cosas de comer en tiempos inestables y demasiado efervescentes, no nos lamentemos después...y si hay corrupción en los aledaños del trono no te quiero contar entre los que le piden la abdicación.
Mucha calma.
Eso mismo me pregunto yo ahora, ¿qué pasará ahora que están las cosas tan revueltas en España?
Un beso.
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