Bueno, a Yulio, y a tutti quanti presumen de haberse
acostado con no sé cuántas miles de mujeres, o de hombres, trataríamos de
convencerles, acaso en vano, de la primacía también en este negociado de lo
cualitativo sobre lo cuantitativo. Es posible que habiendo estado enamorado
sólo una vez en el bolero de la vida, más aún, que habiendo hecho el amor
solamente en una ocasión a lo largo de toda una existencia, a condición de que
en la misma la intensidad del sentir haya involucrado la radicalidad plena del
ser, se haya experimentado, disfrutado y conocido más y mejor el sentimiento
amoroso que en una abundantísima promiscuidad superficial de la que nada queda.
De ahí la apócrifa anécdota de aquella pareja de la “gauche divine” barcelonesa
que, a la vuelta de los tiempos convulsos, decíanse perplejos la otra al uno y
el uno a la otra: “oye, tú y yo… ¿llegamos a acostarnos?”.
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“VEINTE RELATOS DE AMOR Y UNA POESÍA INESPERADA”. 12
euros, envío incluido. 165 pgs de SENTIMIENTOS,
HUMOR Y AVENTURAS acerca de la condición humana enamorada… y desenamorada,
en muchas de sus vertientes, cimas y simas, con la emocionante recreación de
las más perturbadoras encrucijadas a que nos arrojan los sentimientos
inevitables. Personalmente dedicados. Pídemelos
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Porque a mi parecer un libro intimista, no tanto
porque nos revele interioridades escabrosas, sino porque sobre todo consiga con
desnudez hablarnos al oído de los paisajes esenciales del alma atormentada de
quien lo escribió, es también uno de los más acabados símbolos por los que
alguien ofrece al Otro –a quien físicamente no tiene delante, al que de otra
forma difícilmente podría hacerlo- la propia mano. Esto soy. En
estas historias –no en forma de un discurso, sino con destreza encarnadas en
personajes vivos a los que les ocurren cosas, a quienes sorprenden los avatares
amargos o alegres de la vida- late la urdimbre sentimental que hasta aquí me
trajo. Quiero ponerlas en común contigo. Quiero revivirlas a tu lado.
Puede que te reconozcas también en ellas. Aquí tienes mi mano.
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