Dice la prensa que en la capitulaciones Lo exige ahora a Ben cuatro coitos semanales, mínimo, para asegurarse así su fidelidad, que le conoce ya de antes y claro. Juridificación cuantitativista hasta de los coitos. No se sabe bien entonces si es la cosa cheque para el disfrute, aval para tenerle en el bote, penoso castigo para el embrute. Se jode así el amor, ¿no? Le leí una vez a Sabina que dos que, después de hacerlo veinte veces, les apetece seguir haciéndolo con el mismo/a, es que están enfermos. Cuánta tontuna. Qué ejemplo de caos, ruido y furia brindan hoy las Celebrities. Podría haberle pedido cuatro poemas semanales mínimo, digo yo. Cantidad, cuentas, cifras, porque de lo cualitativo ya ni hablamos, ¿verdad?
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