Dice P Ig: “El genio bolchevique es
lo que significa la eficacia y la flexibilidad en Política… una capacidad
de flexibilidad táctica sin par en el movimiento obrero… y esto es de una
inmensidad moral sin par… Lenin es
un genio de la conquista del Poder Político, la construcción del socialismo
sigue siendo un enorme misterio
sobre el que no hay una teoría válida y verificable… y sobre todo que los
bolcheviques son capaces de algo que aterroriza a sus adversarios, la capacidad
de producir Orden, de esa capacidad
de lectura de las oportunidades que
abre la Historia… donde uno se encuentra cosas fascinantes como la NEP, la nueva política económica, algo
aparentemente de derechas que era imprescindible, o la propia organización
disciplinada del Ejército Rojo… la característica fundamental de los comunistas
españoles en la guerra civil es su capacidad para generar orden, plantear una
política exterior absolutamente pragmática, adaptada a los requerimientos de la
realidad, en España no hay que hacer una revolución, hay que mantener una
República burguesa, un Ejército disciplinado, son capaces de generar una enorme
atracción no sólo entre sectores del Ejército y de la policía, de las clases
medias…”. Acabáramos, Lenin … ¡más
el salto de la rana hacia los comunistas españoles!... para esto: eficacia,
flexibilidad, Orden, NEP imprescindible, disciplina interna, pragmatismo,
mantener una República burguesa, atraerse a las clases medias. Es decir, voilá el anuncio del viraje posibilista,
ese cordobés salto de la rana para el
que reclama disciplina, hacia el pacto con el PSOE… ¡que era lo que defendía en
febrero el degradado Errejón! Más
que el genio, el morro bolchevique, cabe decir.
Cree así que ahora “a las
organizaciones políticas que aspiran a llevar a cabo procesos de
transformación”, o sea, a ellos, no les toca el debate reforma o
revolución, sino el “a priori enormemente
modesto sobre la construcción de sistemas políticos post-neoliberales…
un desafío aparentemente menos ilusionante que el de la construcción de una
sociedad más justa y diferente al Capitalismo pero que no es menor, y es cómo
se pueden construir sociedades en las que la economía de mercado va a seguir
existiendo pero con un control público de los sectores estratégicos, en las que
los derechos sociales se pueden garantizar junto a los derechos humanos, donde
la Igualdad y las Políticas Públicas
que favorezcan la Dignidad de los sectores subalternos puedan ser una realidad…
estos debates no son tan eróticos como
los de reforma o revolución pero es probable que sea el más pertinente a la
hora de asumir la dificilísima tarea de cambiar algunas cosas desde las instituciones administrativas,
asumiendo además que el momento jacobino nunca desaparece, puede aparecer en diferentes
coyunturas… en ese proceso tan difícil y complejo creo que el genio bolchevique es el mejor legado que hemos recibido de la
Revolución de Octubre para trabajar en favor de la mayoría, en favor de los
de abajo”. Entre líneas: vamos a intentar el pacto con el PSOE rebajando el Programa
Máximo para, ya en el Poder, preparar desde esos resortes nuestro momento,
el del genio bolchevique, y asaltar
entonces ya sí que sí los cielos, puesto que, genio no se sabe aún bien si, pese
al piropo ansoniano, Iglesias lo es,
pero desde luego, queda claro, en pleno siglo XXI, a Lenin,
ese antidemócrata de libro, él se acoge. In
Lenin he trust, vamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario