Ayer vi una película excepcional, hermosísima, de esas contadas obras por las que agradeces haber nacido sólo para haber podido disfrutarlas. Está ahora en todas las carteleras, sí. Mi cuerpo y mi alma escritoras me pedían escribir sobre ella, recrearla, encomiarla, recomendarla. La razón me hizo dudar. Pensé: seguro que muchas personas que aquí a menudo recalan –eso hoy es muy fácil saberlo- se irán luego a pagar la entrada para verla… a la misma vez que seguirán ignorando mi libro de poemas, por el que pido sólo 10 e, envío incluido y personalmente dedicado. Recuerda, me dije, que aún no has recuperado del todo los dineros tuyos empleados en la más que digna autoedición. Dudé. ¿Qué hago? En fin, ya me gustaría que las cosas fueran para mí diferentes, mejores. (Por supuesto, si cualquiera de los amigos que tiene mi libro siente curiosidad por esa peli, no tiene más que decírmelo y por privado con sumo gusto se la apunto). Diario del escritor sin Nombre, yes.
SOY ESCRITOR Y MI LIBRO MERECE LA PENA: EL ALGORITMO DE LOS BESOS TRUNCADOS: amores y humores, sentimientos e ironía, desengaños e ilusiones, versos y besos, ternura. Pídemelo aquí. Te gustará. 152 pgs, 10 e envío incluido.
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