No podían ser mis ROSAS para ti ni una más, ni una menos. ¿Por qué? Porque 111, ese número que enuncia la unidad repitiéndola tres veces, es una cifra –o clave- mágica, que consigo transporta la luz brillante de un foco, de un Faro. Así lo recoge la Cabalística, en tanto que triple conocido como “número de los ángeles”, pues, dicen, estos se aparecen cuando quieren aparecer y comunicarse con los humanos. Entonces el 111 aparece asociado a un relevante flujo de energía externa e interna de la persona, que significa una esperanza y un despertar de la persona hacia las verdaderas ilusiones. La irrupción del 111 responde así, en general, a una vibración optimista, a una ventana abierta a la oportunidad, a una convocatoria de creatividad. Es decir, que si un desconocido, en un impulso imaginativo te ofrece un ramillete de 111 Rosas, yo que tú lo aceptaría. Y ya si es un conocido, para qué más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario